-Soy gorda... ¿y vos?-

Ser o no ser… esa es la pregunta. O por lo menos, mi pregunta. ¿Sos gorda o estás gorda? La diferencia está en un tema de identificación más que de peso.

Podés estar gorda porque estás tomando alguna medicación que provoca aumento de peso como efecto secundario. Podés haber cambiado tu alimentación en los últimos tiempos y haber engordado por esa razón. Puede ser que hayas pasado por alguna crisis y hayas comido en exceso para superarla. La idea fundamental es que el estar gorda es algo temporario y sujeto a circunstancias especiales.

En este caso, claramente no te identificás como gorda. Sabés que tu cuerpo tarde o temprano va a volver a su constitución delgada, y por eso la forma en que te movés en tu espacio y cómo te relacionás con los demás surge desde esa perspectiva.

Sos gorda cuando “gorda” es la forma natural de tu cuerpo. Lo más probable es que tu familia, o por lo menos una rama de ella, esté compuesta de mujeres gordas o de cuerpo grande. Y aunque ya intentaste mil y una dietas y lograste perder muchos kilos, al final tu cuerpo siempre volvió a su forma original.

Ser gorda es algo permanente. Creciste así, y desde esa perspectiva aprendiste a enfrentarte con los demás. Sabés lo que es que los chicos del colegio te pongan sobrenombres crueles, o que hagan apuestas a ver quién se atreve a levantarte. Sabés lo que se siente recorrer todos los negocios de ropa que conocés y no encontrar nada que te entre (ni hablemos de que además te guste). Convivís con la gordofobia cultural todos los días de tu vida, y te inventaste estrategias para moverte en este mundo. Sos gorda cuando esa característica física pasa a formar parte de tu personalidad.

Ser gorda y estar gorda no es lo mismo: identificarte con uno u otro grupo cambia tu perspectiva de lo que te rodea. ¿Lo que sí es igual? Es que esa es la forma que tiene tu cuerpo ahora, en este momento. Y sólo por eso ya se merece tu respeto y cariño. Tu cuerpo gordo no merece ser despreciado, aborrecido ni descuidado. No importa que en un mes puedas lucir como Pampita o que vayas a usar talles “grandes” el resto de tu vida. Tu cuerpo de hoy se merece lo mejor, aunque sólo sea por albergar a la increíble persona que sos vos.

Contame, ¿sos gorda o estás gorda? ¿Creés que esa característica influye en tu personalidad? 

-Gi-